Elementos de diagnóstico
Los perforadores del pino excavan unas galerías en la corteza en forma de volcán de resina por donde penetra en el árbol, al final del otoño.
Otro daño es el que tiene lugar en las ramitas, ya que devora la parte interior durante los meses de primavera.
Ataca sobretodo aquellos árboles que tienen un tronco de un diámetro de más de 6-7 cm. Pero en los troncos de diámetro inferior pueden encontrarse otros xilófagos, y por eso también es importante eliminarlos.
Galerías construídas por los perforadores del pino. Foto: © Luis Núñez |
Los troncos caídos o talados son un atractivo para los perforadores del pino. Foto: © Luís Núñez |
El primer indicador que debemos observar para detectar al insecto es la presencia de ramitas por el suelo, debido al hecho que las devora por dentro y caen al suelo durante los meses de primavera.
También podemos observar la presencia de unos agujeros de entrada en la corteza con una forma de volcán de resina por donde entra en el árbol, al final del otoño.
El color y el vigor del árbol son otros indicadores para detectar la presencia de los perforadores del pino, a medida que el árbol se seca i se vuelve amarillento, el ataque se hace evidente. Para confirmar el ataque se puede rascar la corteza del árbol por encima del lugar en el que se encuentre un agujero de entrada y comprobar si ya se ha excavado la galería.
Resulta importante prestar más atención en al detección cuando existen algunos de estos factores:
- Cerca de zonas forestales con incendios.
- En masas atacadas por procesionaria.
- Cuando se han dejado restos de madera y ramas abandonadas en el bosque.
- En lugares orientados al Sur y con suelo pobre.
- Alrededor de obras que hayan podido causar daños a las raíces de los árboles.
Criterios de selección del perforador del pino (Tomicus destruens). Cuadro de corta y no corta