Control biológico
INSTALACIÓN DE CAJAS NIDO
La procesionaria del pino tiene muchos enemigos: unos le causan enfermedades (virus, bacterias y hongos), otros la parasitan (especialmente himenópteros y dípteros) en las diversas fases del desarrollo: huevo, oruga y crisálida. También están los depredadores, sobre todo los insectos, como por ejemplo las chicharras, que se comen los huevos.
Se debe destacar a las aves insectívoras, como por ejemplo el cuco (Cuculus canorus), el herrerillo (Parus caruleus) o la abubilla (Upupa epops), que pueden llegar a comer grandes cantidades de insectos. La presencia de estas aves tan beneficiosas para controlar la procesionaria se puede fomentar con la instalación de nidos artificiales.
Caja nido para facilitar la cría de aves insectívoras. Foto: © Luís Núñez |
CONSULTAR AQUÍ CÓMO COLOCAR LAS CAJAS NIDO
INSTALACIÓN DE CAJAS REFUGIO PARA MURCIÉLAGOS.
Los murciélagos se consideran también grandes predadores de las mariposas en vuelo y por eso se instalan cajas refugio para estos animales.
Caja para el resguardo y descanso de murciélagos. Foto: © Luís Núñez |
Detección e identificación de murciélagos, excelentes controladores de procesionaria. Foto: © Luís Núñez |
CAPTURA DE LOS MACHOS CON FEROMONA
Se trata de un sistema de control muy recomendable para actuar en zonas con bajo nivel de infestación o en zonas pobladas. Se trata de utilizar trampas que contienen las hormonas sexuales (feromonas) naturales o de síntesis, que atraen a los machos de la especie en fase de mariposa antes de que fecunden a las hembras.
Trampa tipo "bolsa" con atrayente de feromona. Foto: © Luís Núñez |
Trampa tipo "bolsa" con atrayente de feromona. Foto: © Luís Núñez |
ELIMINACION DE BOLSONES
Se trata del procedimiento clásico de lucha contra la procesionaria. Se utilizan herramientas de corte manual con una pértiga, como por ejemplo sierras y tijeras. Después es muy importante quemar los bolsones en un bidón o sobre superfícies preparadas para evitar su esparcimiento.
Cuando esto no se puede hacer, otra manera es bajar los bolsones con un tiro de escopeta utilizando munición especial. En otros lugares más fríos basta romper el bolsón, puesto que las orugas mueren de frío, pero no és este el caso de las Illes Balears, donde es más seguro quemar las bolsas justo a continuación.
Siempre se debe tener en cuenta que se debe causar el menor impacto posible sobre el medio y, por lo tanto, según cada situación se ha de utilizar el método menos agresivo.
Cartuchos para disparar a los bolsones. Foto: © Luís Núñez |
CONTROL
Se trata de uno de los sistemas más utilizados en las actuaciones masivas por razón de eficacia y precio. Hoy en día hay tres tipos de estos productos:
- Los inhibidores de crecimiento, que se aplican cuando el insecto está en la fase de oruga. Impiden que se lleve a cabo la muda de las larvas, de forma que se interrumpe el ciclo biológico y reproductivo.
- Los insecticidas microbiológicos basados en Bacillus thuringiensis var. kurstaki, que para que sean efectivos se deben de aplicar antes de que la oruga logre el 4º estadio.
- Los piretroides sintéticos, que se degradan con facilidad y no producen problemas de bioacumulación en los tejidos.
Tratamiento directo. Foto: © Luís Núñez |
Orugas muertas después de un tratamiento. Foto: © Joaquín Xoy |
Estos productos se aplican tratando mediante avionetas y/o helicópteros en el caso de grandes extensiones o desde tierra mediante un cañón nebulizador cuando la actuación es más localizada y de fácil acceso o está cerca de zonas habitadas.
Para más información, pulse AQUÍ.