Recorrido recomendado.
En la subida a Sa Torre d’Albarca (punto A) las calizas y margas cretácicas, que nos han acompañado durante todo el recorrido, dejan paso a unas rocas de color rosado y gris claro, muy fracturadas en bloques centimétricos. En conjunto, se trata de dolomías y brechas dolomíticas.
Afloramiento de brechas y calizas en la subida a la torre.
Como veremos más adelante (punto D de la siguiente parada), estas rocas se sedimentaron en el Jurásico superior (165-145 Ma) y corresponden a sedimentos marinos. Han sufrido un intenso proceso de dolomitización (alteración química) y brechificación (rotura y fragmentación).
Estas brechas vuelven a aflorar en la bajada desde la torre d’Albarca hacia s’Arenalet donde, además, andaremos sobre dunas fósiles de 15 m de altura (punto B). Se trata, en esencia, de las mismas dunas remontantes que hemos ido viendo a lo largo del recorrido. No obstante, en este punto destaca su gran espesor y, sobre todo, la presencia de grandes bloques de rocas del Jurásico intercaladas (bloques de color rosado). Ello indica que cuando las dunas estaban formándose fueron afectadas por desprendimientos del acantilado sobre el que se adosaron.
Acantilado de brechas dolomíticas con una enorme duna fósil en primer término.
