Geoturismo Illes Balears

Continuamos nuestro recorrido en el extremo sureste de la playa Des Morts donde surge una costa acantilada, formada por capas de conglomerados, areniscas, calizas y limolitas blanquecinas y amarillentas. Se trata de nuevo de la Formación Cala Blanca. 

Lo más destacable en esta zona son los restos vegetales, que se han encontrado tanto como fósiles de hojas bien preservados como descompuestos formando capas ricas en materia orgánica. El registro fósil de plantas en el lugar nos habla de un ambiente predominantemente seco pero con cursos de agua abundantes que permitían la proliferación de bosques higrofítos, es decir, de bosques adaptados a condiciones húmedas. La línea de costa de entonces estaría relativamente cerca, ya que entre las especies estudiadas existen helechos adaptados a vivir en ambientes costeros.

Un buen ejemplo de capas con materia orgánica lo encontramos en el punto A de la parada, donde los restos carbonosos procedente de vegetación descompuesta destacan por su color negro en las limolitas gris claro en las que se encuentra. Para acceder al punto A deberemos descender por un pequeño cauce que corta a las limolitas.

Además, en el extremo norte de la costa es interesante observar los conglomerados, también pertenecientes a la formación Cala Blanca (punto B).

Los conglomerados son clastosoportados, con cantos redondeados con marcas de presión-disolución, muy poligénicos (cantos de diferente naturaleza y origen) y matriz arenosa muy cementada por carbonatos. Presentan bases canalizadas y localmente morfologías lenticulares. Corresponden a canales fluviales cuya dirección de aporte es NNE-SSO.