AFLORAMIENTO DEL CARBONÍFERO DE S'HORT DE SA COVA

En s’Hort de sa Cova se encuentra el afloramiento de los materiales más antiguos de Mallorca, que corresponden al Carbonífero, (359-299 Ma), si bien su edad concreta no ha sido establecida por el momento. Este yacimiento tiene una clara afinidad con el Carbonífero de Menorca.

Aunque sea relativamente fácil acceder a la zona, situada en los acantilados costeros, las pequeñas dimensiones del depósito y su lejanía a zonas habitadas, hizo que pasase desapercibido hasta su publicación en 1984. 


Panorámica del afloramiento: coluviales rojos del Cuaternario, metapelites grises del Carbonífero y conglomerados y areniscas del Pérmico.

El afloramiento carbonífero se encuentra cubierto por depósitos del Cuaternario (2,5 Ma-actualidad) de color marrón rojizo, al noroeste y, contactando mediante una falla, con los materiales violeta del Pérmico (299-251 Ma), al sureste. Estos últimos abundan en esta parte de la costa y consisten fundamentalmente en conglomerados y areniscas de color rojo granate.

Los materiales del Carbonífero, de color gris oscuro, consisten en un grupo de rocas metamórficas que procede del metamorfismo de arcillas y que se denomina roca sedimentaria detrítica formada por arcilla.</p></div>">Pelita afectada por un grado bajo de metamorfismo.</p></div>">metapelita. Dentro de este grupo se incluye también la pizarra.

En el afloramiento es posible detectar algunas evidencias de metamorfismo, tales como presencia de vetas de cuarzo y pliegues muy cerrados. No obstante, se trata de un metamorfismo de bajo grado ya que ha permitido la conservación de algunos fósiles. Éstos son fundamentalmente restos vegetales continentales, que fueron arrastrados y depositados en un medio marino. Además aparecen escasos restos de crinoideos, parientes de las estrellas y erizos de mar.


Vetas de cuarzo (izquierda) y pliegue (derecha) en las metapelitas del Carbonífero.

Cabe destacar que los plegamientos que presentan los materiales del Carbonífero se generaron durante la Orogenia Hercínica y no durante la Orogenia Alpina, que fue la que originó la Serra de Tramuntana. Esta orogenia marca la formación del súper-continente Pangea durante el Pérmico y es la causante de la formación de grandes cordilleras como los Apalaches o los Urales. De hecho, durante ésta, Iberia y América del Norte estaban unidas, por lo que los relieves que existen en España de esta época son en realidad la continuación de los Apalaches.

Dejando de lado el yacimiento de Paleozoico, y coincidiendo con el acceso a la costa se encuentran otro tipo de materiales que merece la pena destacar: un potente depósito de conglomerados del Cuaternario, que denotan que en el pasado el Torrent des Cable que originó la cala de S`Hort de sa Cova tuvo un flujo de agua mucho mayor que el actual, y una colada de Roca sedimentaria originada por la precipitación de carbonato cálcico a partir de aguas sobresaturadas, especialmente en zonas de surgencias kársticas.&nbsp;</p></div>">travertino formada a la salida del manantial de agua de S’Hort de sa Cova, en la base de los conglomerados.


Colada travertínica (izquierda) y depósito de conglomerados asociado (derecha).

La formación de coladas travertínicas es un proceso geológico relativamente rápido, muchas veces ligado a saltos de agua (donde la presión de anhídrido carbónico disminuye de forma drástica), por lo que su morfología es campaniforme. Dado que el caudal de agua, y por lo tanto la precipitación de Roca sedimentaria originada por la precipitación de carbonato cálcico a partir de aguas sobresaturadas, especialmente en zonas de surgencias kársticas.&nbsp;</p></div>">travertino, varía a lo largo del año, se van superponiendo sucesivas coladas que cambian el relieve del propio salto. Durante su desarrollo, comúnmente quedan atrapados restos vegetales que se acaban descomponiendo. De ellos quedan los moldes, que confieren a la roca un aspecto muy poroso.

Esquema del funcionamiento de una colada travertínica.