Biología

 

La hembra deposita los huevos en las fisuras de la corteza del tronco y de las ramas del árbol, aunque sean las ramas más altas.

Gran capricornio - Detalle de las mandíbulas. Gran capricornio - Detalles de la cabeza y el tórax.
Detalle de las mandíbulas.
Foto: © Martí Mayol
Detalles de la cabeza y el tórax.
Foto: © Martí Mayol

De los huevos salen unas larvas pequeñas que se alimentan de la parte exterior del tronco y cuando son un poco más grandes se adentran hacia el interior del mismo.

Durante dos o tres años y hasta que llega el momento de pasar al estadio de pupa, la larva se come la madera de la encina formando unas galerías elípticas. 

Gran capricornio - Galerías. Gran capricornio - Al emerger del tronco, los adultos producen serrín.
Galerías.
Foto: © Luis Núñez
Al emerger del tronco, los adultos producen serrín.
Foto: © Luís Núñez

Justo antes de empezar la fase de pupa, la larva prepara el camino de salida y prepara la cámara de pupación en la parte más externa del tronco y, después de una metamorfosis, la pupa se transforma en el insecto adulto.

Gran capricornio - Adulto sobre la corteza de una encina.
Adulto sobre la corteza de una encina.
Foto: © Xavier Canyelles

Los adultos salen del árbol al final de la primavera o al comienzo del verano. En las Illes Balears salen desde mayo hasta septiembre, pero según las condiciones del clima, este período puede variar. A veces, junto con los nuevos adultos salen también algunos del año anterior, los cuales han esperado condiciones más favorables.

 

Servicio de Sanidad Forestal - Cabecera Baja 03.