A nivel mundial un 17% del total de alimentos disponibles en 2019 se derrocharon en los hogares, puntos de venta y restaurantes. Para reducir el derroche alimentario la Ley 8/2019 de Residuos de las Islas Baleares establece, entre otras medidas, que los establecimientos de hostelería y restauración tienen que facilitar a los clientes que lo deseen, la posibilidad de llevarse la comida sobrante en envases compostables (a excepción de los establecimientos que ofrecen bufet o menús colectivos a los cuales no se podrá pedir este sobrante).

En casa, no debemos dejar perder ningún alimento: tenemos que planificar, conservar, aprovechar y vigilar las fechas de caducidad.